"Un jeroglífico en el móvil"
Ana Sánchez
El País, (18/ 03/2001)
Es la nueva jerga adolescente. Los mensajes cortos de texto
entre teléfonos móviles hacen furor entre los más jóvenes y han creado un nuevo
lenguaje con dos ventajas: es ininteligible para muchos adultos y sale mucho
más barato que hablar de viva voz. Por Ana Sánchez
Pregunten a un chaval entre 12 y 15 años cuánto cuesta un
periódico o la capital de Marruecos. No desespere. Pregúntele ahora cuántos
caracteres entran en un SMS (Short Message Service o Servicio de Mensajes
Cortos) enviado desde un teléfono móvil. La respuesta será unánime: 160. Y
precisan: 160 si lo envía a través de móvil y 120 si lo hace por un portal de
Internet o una plataforma digital. Diego, un chaval de 13 años que espera a su
madre a la salida del colegio, es uno de los enterados. En 10 minutos,
tecleando su móvil como un poseso, ha mandado cinco mensajes a otros tantos
amigos. "En clase no nos dejan usar el móvil y tengo que quedar. Así es
más rápido, me cuesta menos que llama y mandas un mensaje con el contenido de
dos: 'Llgo+ trde. Kdms a Is 6?'(Llego más tarde. ¿Quedamos a las seis?).
(…) Las nuevas tecnologías imponen su lenguaje. Primero se
trataba de familiarizarse con términos como web, puntocom, chat, e-mail,
enlace, arroba o virus. ¿Quién no manda hoy un emilio o compra un cederrón?
Ahora, un torrente de
letras y signos un argot jeroglífico a medio camino entre el telegrama y la
taquigrafía se impone en los habitáculos virtuales. Los A2(Adiós), xdon
(perdón), Bss (Besos), Ktl (¿Qué tal?) F2T (Free to talk?: ¿Estás libre para
hablar?) llegan con fuerza. (…) Una aberración del lenguaje, un tropel de
faltas de ortografía para unos, y una divertida manera de comunicarse para
otros. Una seña de identidad para sus jóvenes adeptos. Chavales que con 15 años
estrenan su segundo móvil "porque el otro estaba viejo y se lo he dado a
mi padre". Pero a pesar de lo rápido que se implanta en nuestro país, ésta
no es una moda patria. El nuevo argot debe mucho a los informáticos
anglosajones, muy acostumbrados a manejarse en el mundo de los tecnicismos
abreviados en siglas. De hecho, los acrónimos más populares vienen del inglés:
W2tlk? (Want to talk? ¿Quieres hablar?) o Gr8iii (Greati).
No se sorprenda por el número de exclamaciones finales. ¿Lo
que ahorran en caracteres por un lado lo desperdician por otro? Puede ser, pero
así logran algo que, a priori parece imposible: transmitir emociones con tres
signos ortográficos. Habla Diego: "Si quieres poner '¿A dónde quieres ir?,
escribes A dnd kirsir?". A menos caracteres, más barato. (…) La diferencia
entre "qué tal estás" y "kte" ahorra ocho caracteres(…)Hay
una interminable lista de tarifas y descuentos que los adolescentes han
memorizado sin necesidad de examen.
Es un mundo que dominan(…) Beep, beep: mensaje. El botellón
del sábado será en la avenida de Brasil y no en la plaza de las Salesas.
Respuesta: "Y pso. Tngo mvid fmily sbdo. Bss wps. Kuntam en chat" (Yo
paso, tengo movida familiar el sábado. Besos guapos. Cuéntame en el chat). (..).
Son útiles para quedar o dar un recado, y, sobre todo, han creado un nuevo modo
de relacionarse entre los jóvenes. Una nueva jerga, un signo más de
identificación generacional, una frontera lingüística con los mayores. "Realmente
ahora sí que no hablamos el mismo lenguaje que nuestros hijos", comenta el
padre de dos chicos de 15 y 17 años con móvil y conexión a Internet. No es nada
nuevo. "Todos los adolescentes tienen un código cifrado de rebelión contra
los mayores. Ahora, simplemente se usan las nuevas tecnologías", explica
el filólogo especializado en Internet Juan Antonio Millán. "Una jerga que
les durará una temporada". Pero ellos no están de acuerdo. "No es un
código secreto, simplemente acortamos porque cabe más y sale más barato",
cuenta Elisa Goñi, de tercero de ESO.
Jóvenes y no tan jóvenes se apuntan a la moda del mensaje
corto. El móvil es cada vez más popular. (…). Los SMS han demostrado que tienen
un virreinato con público propio. Y las grandes empresas de telecomunicación lo
saben. La proliferación de mensajes cortos fue la primera señal de que con el
móvil se puede hacer algo más que hablar. (…). Un servicio que se dispara en
fechas clave, como Navidades o San Valentín.
En los 'chats, foros, 'e-mail' y SMS cada vez es más común
usar estas fórmulas de lenguaje abreviado. Varias editoriales se han lanzado a
la aventura de recapitular los acrónimos, los signos que expresan estados de
ánimo, llamados emoticones, o las fórmulas abreviadas más frecuentes de la red.
La clave: no hay reglas. Es algo espontáneo que surge del ingenio de los
usuarios para jugar con la fonética de las palabras. Lo de los diccionarios
virtuales no es broma. (…)
La nueva jerga no sólo se cuece en las pantallas de los
móviles. Chats, correos electrónicos, foros y todo lo que se apellíde virtual
es caldo de cultivo. "El boom del SMS ha resultado ser un negocio
sorpresa", explica Miguel Ángel Diez Ferreira, profesor de Periodismo
Digital en la Universidad de Navarra. "Ninguna empresa del sector daba un
duro por ellos. Eran muy caros. Pero la gente empezó a inventar a través del
e-mail y del chat fórmulas para transmitir sensaciones. Aparecieron los
emoticones, acrónimos y toda una galería de siglas que los usuarios memorizaban
inconscientemente. “(…).
En los centros de enseñanza ya se echan las manos a la
cabeza. En nueve de los diez colegios públicos consultados, los móviles se
requisan a la entrada al aula o se insonorizan. Este tipo de mensajes han
sustituido a las chuletas o a la bolíta de papel que circulaba entre alumnos.
"Las clases son insoportables. Les hacemos que
insonoricen el móvil, pero se mandan mensajes". La clase de Paloma
Martínez Larios, profesora de Lengua en el Instituto Azarquiel de Toledo, es
paradigmática. No hay más que pasarse por cualquier instituto o universidad. En
los ordenadores, los documentos de word con trabajos de clase no tienen nada
que hacer frente a los chats o los SMS gratuitos que ofrecen los portales de
Internet.
Y es que tan popular es esta nueva fórmula de comunicación
que, si antes te bajaban un punto por no acentuar las esdrújulas, ahora la
falta más frecuente es sustituir la qu por la k e incluso a alguno se le escapa
~a arroba. "Si estás todo el día comiéndote las vocales, siempre se te
cuela algo en los exámenes". Curro Zamora está en tercero de ESO: "Yo
no creo que estemos inventando una nuevo lenguaje, simplemente abreviamos
porque no nos cabe. Yo sólo acorto lo necesario. Cosas de cajón: wapa (guapa) o
Salu2 (saludos)".
Pero no sólo de los menores es el reino de los SMS. Ni tan
siquiera de todos de ellos. Muchos son ajenos a esta moda. Pero, en el lado
contrario, también se pueden ver caras maduras iluminadas por la sorpresa, la
sonrisa, la ansiedad o el júbilo ante un nuevo mensaje. Visitas sorpresa,
detalles, felicitaciones, retrasos. ¿Qué no se puede contar en 160 caracteres?
La nueva generación de fanáticos del SMS demanda a los fabricantes que añadan
memoria a sus terminales para poder guardar sus mensajes favoritos o poder
incluir la voz. Desengancharse del mensaje corto, como de Internet, del chat o
del correo electrónico dará muchos quebraderos de cabeza a los psicólogos del
futuro.